lunes, 1 de noviembre de 2010

La Riqueza y La Pobreza...


Este pasaje responde de algún modo a los grandes temas sobre la riqueza y la pobreza que hemos ido destacando a lo largo de varios domingos, leyendo el evangelio de Lucas.

Antes de llegar a Jerusalén (donde tiene que decir su última palabra sobre el templo), Jesús pasa por Jericó, ciudad rica, la en hoya del Jordán, donde normalmente los peregrinos descansaban el sábado, para subir de madrugada (el primer día de la semana, hoy domingo) hacia Jerusalén, recorriendo casi treinta kilómetros de duro ascenso. Los curiosos del pueblo le esperan, esperando también a los cientos de peregrinos galileos que van a Jerusalén.

Entre los que esperan está Zaqueo, oficial de publicanos (administradores de aduanas), hombre rico, pero quizá pequeño, que se sube a un árbol para verle (o quizá para pasar inadvertido). Pero Jesús le ve y le dice que le invite (se auto-invita). Quiere pasar el día (un largo sábado de fiesta) con ese publicano, antes de iniciar el camino sin vuelta de Jerusalén.

Es evidente que van a criticarle: ¿Qué podrá hacer Jesús con este impuro hombre de dineros? Pero a Jesus no le importan las críticas. Quiere hablar con de persona a persona, un largo día de sábado. Y así empieza este pasaje simbólico, de escalofriante actualidad, todo un programa de vida, dialogando un día con Jesús?

Pero:
¿Qué pasaría si Jesús me dijera: Oye, Andres, invítame a tu casa, que estás en la higuera y yo voy de camino hacia Jerusalén y quiero decirte algo? ¿qué me diría Jesús, qué le diría yo?

¿Qué pasaría si Jesús dijera al Papa: Oye, Benito, invítame a tu higuera del Vaticano, que hace tiempo que no voy por allí, y tenemos que hablar de amores y dineros?

¿Qué pasaría si le dijera al Publicano mayor del Reino, el Señor Zapatero: Oye, José Luis, invítame a tu Moncloa, que quiero que me expliques algunas cosas, y quizá tengo yo algunas que decirte…?

¿Qué pasaría si invitara…? Sigamos soñando personas. Y mientras tanto leamos el texto.

1 comentario:

  1. SI,SI. POR FAVOR QUE NOS ENCUENTRE A TODOS EN ALGÚN PUNTO DE NUESTRO CAMINO. QUE NOS ENCUENTRE Y NOS CAMBIE LA VIDA A TODOS COMO HIZO CON ZAQUEO.
    YO LE PIDO QUE CADA VEZ QUE YO TUERZA EL CAMINO VENGA ÉL A LLAMARME LA ATENCIÓN Y VENGA A CENAR EN MICASA.

    JESÚS HAZTE EL ENCONTRADIZO CON CADA UNO DE NOSOTROS!!!!!!!!!!!

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